Es necesario renovar el aire del interior de los edificios mediante la aportación de aire limpio del exterior y la extracción de parte del aire viciado del interior. De este modo se consigue mejorar la calidad del aire interior o IAQ (indoor air quality) en todo local habitado o donde se realiza alguna actividad humana. Esta calidad de aire interior debe ser acorde a los requerimientos de la normativa exigida para cada aplicación.
Los recuperadores de energía domésticos tienen la función de aprovechar las propiedades psicométricas (temperatura y humedad) del aire extraído del hogar e intercambiarlas con las del aire que aportamos desde el exterior. En este proceso de intercambio, el aire interior y exterior no se mezclan sino que, como dice su nombre, intercambian las propiedades para conseguir la temperatura y humedad más idóneas para el espacio donde está instalado el recuperador.
Descubre en este apartado el recuperador de calor residencial que más se adapte a tu hogar: desde recuperadores para una sola habitación (hasta 20m2), a pisos y casas de mayor tamaño (de 80 a 240m2). Todos con motor electrónico EEC para garantizar un funcionamiento eficiente y silencioso.
Recuperador de calor residencial para falso techo con control remoto. Para grandes viviendas y locales de comerciales de 90 a 240m².
> más información
Recuperador de calor residencial descentralizado monoestanza, con control integrado. Para habitaciones de hasta 20m².
> más información
Recuperador de calor residencial para falso techo con control remoto. Para viviendas de hasta 80m²
> más información
Recuperador de calor residencial para suelo o pared para viviendas de hasta 180m². Con certificado Passivhaus
> más información
Recuperador de calor para habitaciones individuales con control remoto para gestionar hasta 6 recuperadores del mismo tipo. Ideal para pisos pequeños sin instalación de conductos en falso techo.
> más información