Una de las formas de clasificar los ventiladores es según la trayectoria descrita por el aire dentro del propio ventilador, y así tenemos centrífugos, axiales y helicocentrífugos.
Los ventiladores helicocentrífugos se llaman también de flujo combinado pues tienen características mixtas entre las dos tipologías anteriores.
Su turbina está diseñada para generar tanto un flujo axial como centrífugo, con lo que consigue mover gran cantidad de aire con un flujo suave y eficiente. Entre las aplicaciones posibles se encuentran los sistemas de ventilación de edificios, procesamiento de alimentos y la fabricación de papel.
Una de las formas en que podemos clasificar los ventiladores es por su forma constructiva. Estos pueden ser: con envolvente, murales, y de chorro o impulsos (jet fans)
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